Consejos para adaptarse a las lentes progresivas
Las lentes progresivas se caracterizan por ofrecer, en una sola lente, la posibilidad de una visión clara a todas las distancias.
Para las personas que sufren de presbicia o visión cansada, las gafas progresivas y las lentes de contacto multifocales son una excelente opción. Después de un breve período de adaptación, el usuario puede disfrutar de una visión clara y nítida en todas las distancias sin tener que cambiar de gafas en diferentes situaciones.
Es común que las lentes progresivas tengan algunas pequeñas distorsiones en los bordes del campo de visión. Sin embargo, las últimas generaciones de lentes progresivas tienen distorsiones cada vez más reducidas, y las lentes más avanzadas tecnológicamente y personalizadas pueden eliminar prácticamente estas distorsiones. Estas distorsiones pueden causar una visión ligeramente borrosa cuando se mira hacia los bordes o hacia la parte inferior de la lente. En algunos casos, también pueden causar una sensación similar a la que se siente al mover la cabeza muy rápidamente, como cuando se nada.
A partir de los 45 años, la vista empieza a cansarse y es frecuente sufrir diferentes problemas refractivos debido al envejecimiento del cristalino y los músculos ciliares. Por lo general, el ojo pierde visión tanto de cerca como de lejos, en más o menor medida, lo que implica que incluso las actividades de nuestro día a día se hagan más difíciles y nos resulte complicado incluso leer, cocinar, ver la televisión o reconocer a alguien por la calle.
¿Cómo evito la sensación de estrenar lentes progresivos?
Para evitar las incomodidades que surgen al usar por primera vez lentes progresivos, se sugiere mover la cabeza suavemente y mirar los objetos de manera directa. Aunque la visión periférica puede ser un poco incómoda al principio, esto desaparece en pocos días. Si el usuario tiene miopía o hipermetropía, puede tardar un poco más en acostumbrarse, pero esto no impide que se adapte bien a los lentes progresivos.
Para acelerar el proceso de adaptación, es recomendable hacer terapia visual. Un óptico-optometrista guía al usuario en una serie de ejercicios sencillos para reducir las molestias y mejorar la adaptación de la visión a las nuevas lentes. Con estas sesiones, el usuario puede notar una mejora significativa en poco tiempo.
Recomendaciones útiles para adaptarse a las lentes progresivas
Por último, presentamos una series de recomendaciones que recopila los mejores consejos de nuestros expertos ópticos asociados para la adaptación a lentes progresivas. Es importante tener en cuenta que es necesario dar algunos pasos pequeños al principio para acostumbrarse a este tipo de gafas. Sin embargo, después de los primeros días, la adaptación se convertirá en una rutina y ni siquiera te darás cuenta de que las estás usando.
1. Al conducir
Cuando conduzcas y necesites mirar la carretera a larga distancia, es recomendable mantener la cabeza en posición normal y utilizar la parte superior de la lente que está diseñada para la visión lejana. Si necesitas mirar el volante, los espejos o la radio, es importante acompañar el movimiento de la mirada con la cabeza. Por ejemplo, si necesitas ver la velocidad del vehículo en el velocímetro, debes bajar ligeramente la cabeza y utilizar la zona central de la lente que está dedicada a la visión intermedia.
2. Al bajar por escaleras
El uso de gafas progresivas por primera vez presenta un riesgo importante al descender escaleras, ya que la tendencia natural es bajar la mirada sin bajar la cabeza. Sin embargo, es recomendable adoptar el enfoque opuesto al bajar escaleras con gafas progresivas, manteniendo los ojos en una posición fija mientras se baja la barbilla, permitiendo que los ojos utilicen la parte superior del lente. Si los ojos se mueven hacia abajo, se podría perder el equilibrio al acceder a la sección de visión cercana del lente.
3. Cuando miras algo de cerca o lees
Cuando estás leyendo un periódico o una revista con gafas progresivas, es importante utilizar la parte inferior del lente para enfocar correctamente. Sin embargo, a diferencia de otras situaciones, no es necesario seguir el movimiento de los ojos con la cabeza. De hecho, es recomendable hacer lo contrario: bajar la mirada sin bajar la barbilla para permitir que los ojos utilicen la zona dedicada a la visión lejana en la parte superior del lente. Si bajas la barbilla, el ojo se desplazará hacia la zona de lejos del lente, lo que puede dificultar la lectura. Por lo tanto, recuerda mantener la cabeza quieta y bajar la mirada mientras lees con gafas progresivas para lograr una visión clara y cómoda.
4. Adapta tu entorno de trabajo
Para mantener una postura saludable mientras trabajas frente a la pantalla, es fundamental que ajustes la altura de la pantalla adecuadamente. La posición ideal es aquella que te permita ver todo el contenido de la pantalla sin tener que inclinar la cabeza hacia arriba o hacia abajo, evitando así tensión y dolor en el cuello y los hombros.
5.Combina tus gafas progresivas con lentes de contacto multifocales
Tomarte un descanso de tus gafas de vez en cuando te permitirá dar un respiro a tus ojos y disfrutar de una visión más amplia en diferentes situaciones.
6. Practica ejercicios sencillos
Puede levantarse y sentarse de forma controlada mientras mira a un punto fijo. También puedes concentrarte en leer una palabra mientras mueves la cabeza hacia los lados. Estás ayudando a tu cerebro a interpretar los nuevos campos de visión.
Resumen
Es nuestra opinión, las lentes progresivas son la solución más completa para llevar una vida lo más parecida, visualmente hablando, a antes de ser previstas. Por ello, trabajamos con la última tecnología en lentes progresivas, Visioffice®, lo que nos permite mejorar la experiencia visual de nuestros pacientes. En la adaptación de lentes progresivas realizamos un control de la agudeza visual y graduación, además de un estudio de los hábitos de vida y fisonomía para adaptar lo máximo posible las nuevas lentes a las necesidades y características de cada persona.
Es fundamental que la nueva graduación se realice pensando en la persona, en las actividades que ocupan su día a día y explicar muy bien qué le va a aportar llevar unas lentes progresivas y que no.
Puedes consultarnos en cualquiera de nuestras ópticas en Málaga, te explicaremos todo el proceso.
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